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Jun, Granada, España

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La Cerámica Califal

El período de apogeo de Al-Ándalus, época durante la cual el pueblo musulmán conquistó y tuvo absoluto control de la península ibérica durante setecientos años, dejó un extenso legado histórico en cuanto a arte, cultura, arquitectura y decoración, que hoy día se puede seguir observando al recorrer calles de muchas ciudades españolas.

La intersección entre la cultura occidental con la oriental ha dejado huellas emblemáticas en la vida de todos los seres humanos, y es que son muchos los objetos, maneras de trabajar y formas de construir que debemos al desarrollo ocurrido durante los años de Al-Ándalus. La cerámica verde y manganeso es un excelente ejemplo de ello.

Qué es la cerámica verde y manganeso

También conocida como cerámica califal, nació como forma de ornamentación durante el califato que gobernó la península ibérica durante el siglo X. Muchos historiadores coinciden en que la ciudad palatina de Medina Azahar, en Córdoba (España) es su localidad de origen. Y no es de extrañar, puesto que Córdoba fue la capital del califato durante muchos años, y su principal ciudad en toda la península.

Este tipo de cerámica debe su nombre a dos razones: El califal por el sistema de gobierno que regía la ciudad y región donde nación, el califato, un medio de organización política donde el poder recae sobre el “califa”, quien al mismo tiempo es la principal figura en la tierra de la religión musulmana.

ceramica-califal-minEl verde y manganeso se debe a que, para los musulmanes, la combinación de colores tiene un alto contenido simbólico. Para la cerámica califal se hizo uso constante de tres colores:

  • Blanco, que simboliza Claridad, Lealtad y Poder.
  • Negro, que simboliza Austeridad, Poder y Dignidad.
  • Verde, que simboliza felicidad, y que es el color más relacionado con la cultura musulmán.

Arte de gran legado

Aún con la caída del califato y del control musulmán sobre la península ibérica, la cerámica verde y manganeso continuó evolucionando durante varias décadas. Hoy podemos apreciar que sigue siendo un estilo de ornamentación muy importante para la cultura musulmán, que tiene la capacidad de transmitir al mismo tiempo un delicado estilo para la decoración de un hogar y oficina, junto con un alto contenido histórico y de poder.

Utilizar cerámica califal para decorar el área de un hogar significa demostrar buen gusto, conocimiento sobre la historia, y un auténtico sentido de querer transmitir algo con cada adorno. Existen muchos productos elaborados con este estilo, desde platos y jarrones, hasta copas y espacios para guardar especies.

Se pueden encontrar a un módico precio en todo el territorio español, principalmente en Andalucía, aunque también está presente en el resto de los países que conforman la península ibérica, y en cada nación de origen musulmán.

La cerámica verde y manganeso es una auténtica joya de nuestra historia, que debemos seguir valorando como parte de nuestras raíces.

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