El original de esta recreación se conoce como el Vaso de Hornos.
La realización de cualquiera de estas recreaciones exige la recuperación y reproducción de una técnica casi perdida en el tiempo, imprescindible condición para transmitir todo el candor y esmero, con que en su día los originales fueron realizados.
Zonas sin esmalte, chorreones, desconchaduras y otros defectos en casi toda la pieza, han obligado a un minucioso trabajo de interpretación y diseño. Hay que decir también que la ausencia de asas (por accidente) en casi todos los vasos se ha respetado ya que contribuye de manera especial a su aspecto actual.
Su talante está a la vista, cualquier definición más en su presencia, podría distraer la atención que esta elegante y monumental pieza requiere.
Esta obra, se ha realizado en dos tamaños, la versión menor de 64 x 30 cm y la réplica a…